lunes, 17 de marzo de 2014

Karl Marx sabía lo que decía: 5 predicciones del capitalismo moderno

Marx es inescacapable cuando observamos el reflujo de recesiones económicas, apatetitos imaginarios creados por el marketing, la globalización, los monopolios y las grandes ganancias del 1%.

 

Aunque el comunismo como modelo político haya perdido partidarios en los últimos tiempos, la teoría económica marxista sigue siendo de las más lúcidas para entender el modelo capitalista actual. En varios sentidos la mente detrás del comunismo es la que más claramente anticipó el consumismo y demás aristas del capitalismo moderno.
La revista Rolling Stone ha reunido 5 predicciones de la teoría marxista que pueden constatarse en el sistema económico actual, dotando de aires proféticos a Marx. En Los Hijos del Limo, Octavio Paz escribió: “las violencias y cambios del siglo XX confirman el genio apocalíptico de Marx”.

  
1. La gran recesión (la naturaleza caótica del capitalismo)
El patrón característico de agudo crecimiento y caída en el capitalismo fue descrito como “caótico” por Marx; el no tomar acción para contrarrestar esta tendencia produce siempre recesiones o depresiones económicas –esto hasta que se transforme la sociedad hacia un nuevo modo de depresión. Este patrón del materialismo histórico puede claramente presenciarse en la crisis ecónomica del 2008, precipitada por el colapso del mercado inmobiliario. Justamente debido a la utilización de instrumentos financieros, “capital ficticio”, en términos de Marx.

2. Apetitos imaginarios
Escribiendo hace 150 años Marx ya había detectado la tendencia del capitalismo, en búsqueda del crecimiento infinito, de crear falsas necesidades “la extensión de los productos y las necesidades se vuelve una especie de calculada y confabulatoria servidumbre a sofisticados apetitos imaginarios, inhumanos e innaturales”.  Un ejemplo patente de esto es la fiebre religiosa que generan gadgets como el iPhone 5, provocando enormes filas de fieles que buscan comprar el nuevo aparato cuando aún tienen un aparato perfectamente funcional que en realidad no difiere mucho (el iPhone 4). Como esto hay numerosos ejemplos.

3. La globalización del capitalismo
Como señala Sean McElwee en Rolling Stone, las ideas de la sobreproducción de Marx lo llevaron a predecir el esparcimiento del capitalismo por todo el planeta en búsqueda de  nuevos mercados. “La necesidad de un mercado en constante expansión corretea a los burgueses por toda la superficie del orbe. Debe arraigarse en todas partes, establecerse en toda partes y formar conexiones en todas partes”. Esto es lo que hoy llamamos globalización; de nuevo, Marx lo vio venir cien años antes y entendió por qué sucedería.

4. Monopolios
La teoría económica asume que la competencia se mantendrá de forma natural; Marx, más sagaz, notó que el poder del mercado se centralizaría en compañías monopólicas que se depredarían entre sí. No es difícil ver esta tendencia en el mundo globalizado: no sólo en Estados Unidos Wal Mart ha desplazado tiendas locales de pequeños empresarios, también en México han desaparecido minoristas a favor de gigantes que a veces usan otros nombre para poder penetrar el mercado sin que haya alarmas de monopolio. Grandes conglomerados de medios, telefónicas y petroleras son algunos otros ejemplos.

5. Salarios bajos, grandes ganancias (Ejército industrial de reserva)
Marx argumentó que los salarios serían mantenidos bajos por un ejército industrial de reserva. Los capitalistas siempre querrán pagar lo menor posible, lo cual es fácil de hacer cuando hay tantos trabajadores flotando por ahí. Después de una recesión, lo que ocurre es un alto índice de desempleo que haría que los salarios se mantuvieran en cifras bajas, mientras las ganancias se elevan. El Wall Street Journal justamente ha detectado esto en la actualidad: mientras las ganancias corporativas crecen “con una característica marxista”, sigue habiendo una gran cantidad de desempleados.


Robert L. Heilbroner escribe: “Volteamos a Marx, no porque sea infalible, sino porque es inescapable”.

No hay comentarios: